Os aviso desde el primer momento: no somos especialistas en comida ni en posts sobre comida, no somos gourmets ni nos apasiona demasiado la comida… Tenemos muy pocos prejuicios comestibles, y aún menos cosas que no comemos (somos «omníveros» :)); nos gusta probar platos típicos de la zona y pensamos que es más rico comer en los sitios donde lo hacen los locales… Siempre cuando viajamos a algún país, volvemos con una imagen generalizada sobre la variedad y preferencias de lo que comen.
Y nuestra imagen sobre comida de Marruecos es la siguiente: comen mucha verdura; principalmente asada. De entrantes: aceitunas, queso y salchicha tipo mortadela; en bares os pueden servir legumbres.
De postre – dulces variados con frutos secos, nueces o fruta (por ejemplo, naranjas con canela).
Nunca falta – té: té marroquí dulce o verbena para relajarse.
Platos típicos son:
KusKus: kus kus con verdura asada y además puede llevar carne. Muy rico y nutriente. Se sirve en un cuenco especial de arcilla que guardo el calor.
Tajín: patatas asadas con verdura. Igual que kuskus puede llevar carne. También muy rico y también nutriente ;))) Tiene variedades: tipo de carne, verduras, especias…
Ensalada fresca: lleva tomate, cebolla etc. en trozos muy pero MUY pequeños. El sabor muy agradable, refrescante y especias especiales lo diferencian de ensaladas a las que estamos acostumbrados en Europa. Cuando nos sirvieron esta ensalada una vez en el refugio, yo sola comí la mitad del plato, así de rica estaba!!! Puede llevar aceitunas, queso… pero la verdura SIEMPRE en trozos muy pequeños.
Sopas: muy ricas, calientes, imprescindibles después de esfuerzos físicos en temperaturas bajas. No sé que llevan, pero te llenan 😉
Cordero: muy tierno al horno.
Kefta: muy buena ;))) parecía tortilla muy tierna con albóndigas 😉
Pinchos: Es típico que te los sirvan con verdura, que les da un sabor exquisito. Es muy común encontrarlos en puestos callejeros, de tamaño muy pequeño pero ricos. Una vez nos los sirvieron en la terraza del albergue «L’Epiney» en Imlil, con vistas al pueblo… Un lujo… Lo único es que los gatos del albergue querían con compartiéramos con ellos….
Pan: muy rico y sin comentarios. Podría comer el pan sin acompañar…
Hamburguesa: las podéis encontrar en los puestos/bares de la calle sin problema. También están muy ricas, y además, el formato es el habitual y muy querido 😉
Curiosidades: Así nos sirvieron café y zumo en la terraza de un restaurante en el centro de Marrakech. Supongo que para que el camarero no los derramara por el camino 🙂 o ¿por qué?
Curiosidades: me flipan botellas de Fanta y Coca-Cola marroquí ;))
NB: Es posible sobrevivir si eres vegetariano: hay muchísimos platos que no llevan carne e incluso si avisáis al cocinero, os lo puede preparar por separado de la comida que lleva carne. Respetan mucho la decisión de ser vegetarianos.
NNB: En hoteles encontraréis comida a la que estamos acostumbrados en Europa, pero siempre tendrán algo típico de la zona, como, por ejemplo, los mejores crepés con miel que he probado!!!
Sigo pensando que lo mejor es probar cosas típicas de la zona… Si no tenéis ningún prejuicio sobre lo qué coméis, podéis preguntar de qué y cómo preparan los platos… pero si tenéis vuestras cosillas de asquito a veces es mejor disfrutar de la comida sin más preguntas 🙂
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Diario de nuestro primer viaje con agencia (destino: Marruecos)